Cultivada desde hace casi 5.000 años, la rosa es la más mítica de las flores. Atributo de las diosas Inanna, Ishtar, Astarté, Afrodita, Venus y Lakshmi, desde hace siglos es un símbolo de feminidad, belleza y amor eterno arraigado en nuestro imaginario colectivo.

Los expertos de Olibanum nos desvelan algunos de los secretos de esta flor que, aun siendo indispensable en perfumería, no deja de ser rara y muy preciada, ya que se necesitan unas 4 toneladas de pétalos para obtener 1 kilo de esencia. Por algo es la Reina de las Flores…

PLANTA DE RAÍCES PROFUNDAS

Los fósiles más antiguos del género se remontan al Eoceno medio, es decir, hace unos 40 millones de años. Sin embargo, las pruebas de su cultivo por parte del hombre son mucho más recientes: se remontan al año 2500 a. C.

LAS LÁGRIMAS DE AFRODITA

Cuenta la leyenda griega que, de las lágrimas de Afrodita, quien lloraba la muerte de su amante, Adonis, brotaron las primeras rosas rojas.

Este vínculo reaparece varias veces en la literatura griega antigua, especialmente en la “Ilíada”, cuando la diosa embalsama al difunto Héctor con un ‘divino aceite de rosa’.

AROMA DE SANTIDAD

En el siglo III, San Ambrosio hizo de la rosa y sus espinas una metáfora del pecado original. En el siglo IV, Sedulius completa esta idea añadiendo que la rosa era más bien un símbolo de la humanidad, salvada a través de la Virgen María.

En el siglo VI, San Medardo coronaba a las doncellas virtuosas con rosas blancas, al mismo tiempo que el rey Childeberto hizo plantar para su esposa el primer jardín de rosas de Europa.

Dos siglos después, Carlomagno ordenó que se cultivaran lirios y rosas en todo el Imperio. Todas esas iniciativas darían a la rosa ya no un perfume de libertinaje, sino un aroma de santidad…

EL PRIMER PERFUME DE ROSAS DE LA HISTORIA

En el siglo IX, Ibn Jaldún menciona en “Al-Abr” un tributo de 30.000 frascos de agua de rosas, testimonio de una actividad de d’estilación ya reconocida.

Un siglo más tarde, la primera mención de un ‘attar de rosas se encontró en China en una lista de bienes importados de Persia para la corte imperial, que ya desde Confucio era conocida por su afición a las rosas.

LA ROSA LLEGA A EUROPA

En 1710, con el establecimiento de las primeras plantaciones de rosas en el valle de Kazanlik (Bulgaria), el aceite esencial de rosas entró en el mercado europeo, aunque todavía tímidamente, ya que los perfumes de la época todavía se elaboraban principalmente a partir de cítricos y aromáticos.

No fue hasta principios del siglo XIX y con el desarrollo de una nueva forma de perfumería que el aceite de rosas llega al mercado europeo.

PRINCIPALES PRODUCTORES

Si bien Bulgaria es el principal productor de aceite esencial y absoluto de rosa, hoy podemos encontrar proveedores en Turquía, Marruecos, sin olvidar India e Irán, que perpetúan así la tradición iniciada hace casi un milenio.

Existen otras rosas más raras, como las de Grasse y Taif. Estas últimas son las más preciadas de todas y crecen en las alturas de las montañas árabes.

RETRATO OLFATIVO: ROSA, DE OLIBANUM

Una rosa pura a base de absoluto de rosa, olíbano y coriandro. Este detalle, que marca la diferencia, aporta frescura y difusión al dúo de rosa y olíbano. El absoluto de rosa turca de Rose imprime su dimensión cerosa y melosa para un toque extra de naturalidad.

¿UN PLUS? PRACTICA EL LAYERING

Los perfumes Olibanum comparten la misma estructura olfativa, por lo que se pueden combinar entre sí para personalizar al máximo la fragancia.

Precio:

EDP 87€ / 50ml