La nueva añada de ‘Desafiante’, el verdejo fermentado con sus lías finas de Monte La Reina, encarna perfectamente el espíritu de la bodega.

El pasado año, en su incesante búsqueda de innovación y respeto por la tradición, se lanzó este vino con una nueva identidad visual, un renovado etiquetado y reflejo del espíritu explorador de la bodega.

Este verdejo sobre lías es el resultado de años de experimentación y dedicación, una muestra tangible del compromiso de Monte La Reina con la innovación y la calidad. ‘Desafiante’ no es un verdejo cualquiera; es un vino pionero en la D.O. Toro —una denominación tradicionalmente reconocida por sus tintos— y su proceso de elaboración lo distingue aún más.

Pero si algo lo hace destacar, especialmente en esta época, es su versatilidad y frescura, que lo convierten en el compañero perfecto para los momentos más veraniegos. Gracias a su afinidad con los arroces y los mariscos, ‘Desafiante’ se ha ganado un lugar en las mesas de aquellos que buscan una velada con familia y amigos frente al mar.

Elaborado a partir de la uva verdejo, que encuentra en los suelos de Toro un aliado perfecto, ‘Desafiante’ es sometido a una cuidadosa fermentación en depósitos de acero inoxidable, donde el mosto reposa sobre sus propias lías. Este proceso otorga al vino una complejidad y un carácter que desafían las expectativas de los blancos tradicionales. En boca, despliega una intensidad seductora y una textura untuosa que envuelve el paladar. Su frescura se equilibra con una acidez vibrante, mientras que las notas frutales se entrelazan con un elegante final amargoso.

‘Desafiante’ es, en todos los sentidos, un verdadero testimonio del carácter transgresor de Monte La Reina. Con él, Monte La Reina reafirma su posición como una de las bodegas más rompedoras y visionarias de la D.O. Toro.

Este proyecto vinícola, que aúna pasado, presente y futuro, se mantiene firme en su misión de elevar la experiencia del vino a nuevas alturas, explorando sin miedo nuevos métodos y territorios. “En Monte La Reina, respetamos la tierra que nos ha visto crecer, pero también creemos en la importancia de explorar y descubrir. Cada botella que producimos es una expresión de esta dualidad: un profundo respeto por nuestras raíces y una pasión incansable por la innovación”, concluye Carolina Inaraja.

EXPLORACIÓN Y ARRAIGO

Desde sus inicios, Monte La Reina ha combinado un profundo respeto por sus raíces con una curiosidad incansable por descubrir y experimentar.

Inaraja, aunque es la primera de su familia en dedicarse profesionalmente al mundo del vino, siempre ha estado profundamente ligada al campo. Desde pequeña, escapaba de su Valladolid natal para jugar entre los viñedos de Toro, donde su padre se dedicaba a la agricultura. Aquellos momentos de libertad y descubrimiento plantaron en ella la semilla de su pasión por el vino y su determinación de explorar nuevos caminos.

Esos recuerdos de su infancia, corriendo entre las vides y respirando el aire fresco del campo, han perdurado en su memoria y se han transformado en la esencia de la nueva imagen de Monte La Reina. Hoy, ya adulta y al frente del proyecto, Carolina sigue explorando, pero ahora lo hace con nuevas variedades de uva, técnicas de vinificación y combinaciones innovadoras que desafían los límites de la D.O. Toro.

Esta conexión entre el pasado y el presente se refleja en la bodega, donde el arraigo a la tierra y la tradición se entrelazan con un espíritu de juego y experimentación, impulsando a Monte La Reina hacia un futuro audaz y lleno de posibilidades.