Ubicado en el corazón de la naturaleza pirinaica, el hotel La Vella Farga se ha convertido en un santuario para aquellos que busquen evadirse de la rutina diaria y sumergirse en un enclave mágico.

Inaugurado en el 2015, este tesoro arquitectónico con más de nueve siglos de historia ha sido meticulosamente restaurando por sus propietarios Martí Angrill y Gemma Ribera, convirtiéndolo en un oasis de lujo montañés, gastronomía exquisita y una hospitalidad excepcional.

Con sede en Lladurs, un pintoresco pueblo de la comarca del Solsonés en Lérida y conocida como la “comarca de las mil masías, La Vella Farga es un testimonio vivo de la singular arquitectura rural de Cataluña.

Dispone de 15 habitaciones que ofrecen unas vistas impresionantes a los bosques y prados circundantes, combinando la majestuosidad de la arquitectura medieval con las comodidades de un hotel de lujo moderno.

Cada una de ellas lleva el nombre de algunos de los antiguos moradores de la vivienda o de sus trabajadores y allegados, como los mozos o mosenes. Luminosas, cómodas, tranquilas y algunas con terraza, con porche o con jardín privado.

Todas ellas están diseñadas por sus propietarios con piezas de anticuarios cuidadosamente seleccionadas y restauradas.

De hecho, el hotel dispone de una boutique llamada L’heritage Boutique, que expone una selección de piezas de interiorismo de estilo rústico, algunas de diseño propio, además de objetos de coleccionista, accesorios y decoración floral.

La Vella Farga destaca también por la gastronomía, ofreciendo a sus huéspedes y visitantes una experiencia culinaria centrada en la cocina tradicional catalana bajo la dirección del chef Jordi Llobet i la responsable de cocina Teresa Badrenas quien ofrecen un viaje por la comarca a través de los ingredientes locales y de temporada.

Actualmente, ofrecen dos propuestas gastronómicas; la carta de autor o el itinerario gastronómico con diferentes platos.

La Vella Farga puede presumir de su piscina exterior climatizada, que posibilita su disfrute de mayo a octubre a pesar de los rigores del clima de la zona. Para este próximo verano, se está construyendo la casita de la piscina para poder disfrutar de un picoteo y bebidas en el jardín de la piscina.

Uno de los servicios que ofrece este espacio de lujo son sus tratamientos de belleza y bienestar, con una amplia carta de terapias, entre las que destacan masajes de diferentes tipos y quiromasajes, reflexología podal, gimnasia personalizada –ideal para aliviar las tensiones del día a día.

Por otro lado, ofrece actividades de teambuilding como por ejemplo clase de pilates o de yoga, excursiones con guías especializados, excursiones en BTT, excursiones 4×4, vuelos en globo aerostático, excursiones a caballo, visitas guiadas a Solsona, al Santuario del Miracle con cata de vinos y quesos.

En los meses más cálidos, existe la opción de disfrutar de estos servicios al aire libre, bajo una pérgola en un bosque de árboles centenarios. Si el frío arrecia o llueve, las antiguas caballerizas de la masía son ahora una sala de wellness plenamente equipada para la desconexión y el relax.

Actualmente, todos estos servicios son en unas salas de la masía, pero para finales de 2024 se creará una masía contigua a La Vella Farga dedicada únicamente al spa y a los tratamientos.

Es un hotel perfecto también para realizar eventos ya que es un enclave singular en la región para cualquier tipo de celebración o evento de empresa, ya que adapta todos sus espacios a las necesidades de los novios, que encontrarán en esta masía un espacio lleno de historia y de posibilidades culinarias para disfrutar.

Además, el hotel La Vella Farga ofrece una variedad de paquetes diseñados para diferentes momentos, que incluyen experiencias gastronómicas de desconexión o relajación en pareja.

Para aquellos que buscan aventura, la zona ofrece una amplia gama de actividades deportivas, desde senderismo y golf hasta paseos a caballo u observación de estrellas. Además, la comarca cuenta con una riqueza arquitectónica que incluye joyas del Románico, Gótico y Barroco que vale la pena descubrir.