Beneficios para la salud más allá del placer gastronómico:
El jamón de bellota 100 % ibérico es un tesoro cargado de numerosos beneficios para la salud.
Su grasa, rica en ácido oleico, fortalece el sistema cardiovascular, protege y regula el flujo sanguíneo, reduciendo la posibilidad de inflamaciones y previniendo enfermedades cardíacas.
Estudios respaldan que su consumo beneficia especialmente a diabéticos, hipertensos, personas con colesterol alto, afectados por un ictus y pacientes cardiópatas.
Además, este manjar no solo favorece al corazón, sino que su contenido de hierro ayuda a prevenir la anemia, convirtiéndolo en un aliado indispensable para deportistas al aportar proteínas y reducir la fatiga durante la actividad física.
Bienestar emocional:
El consumo de jamón ibérico también se vincula a la gestión del estrés y la ansiedad. Su contenido en triptófano, un aminoácido precursor de la serotonina que contribuye a aumentar los niveles de bienestar y calma, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad en la vida diaria.
La grasa del Jamón Ibérico sí es saludable:
La grasa del jamón ibérico no solo aporta textura y sabor. Más del 70 % de estos tipos de grasa es insaturada, lo que la convierte en una opción saludable.
Además, su bajo contenido en sal contribuye a mantener un equilibrio entre sabor y salud.
Jamón Ibérico vs. Serrano:
Carrasco Ibéricos enfatiza la importancia de distinguir entre el jamón de bellota 100 % ibérico y el jamón serrano. Mientras que el primero proviene de cerdos ibéricos alimentados con bellotas y criados en libertad, el serrano puede ser de diversas razas de cerdos blancos alimentados con pienso.
Esta diferencia se traduce en tonalidades, texturas y sabores distintivos, siendo el ibérico infinitamente más jugoso, sabroso y beneficioso.