En los bulevares del París del siglo XIX se daban cita con asiduidad las grisettes, las jóvenes oficialas de los talleres de costura de la capital. Vestían su lozanía y sus ganas de vivir con el modesto atuendo de tela gris que les valió su sobrenombre.
 

Cuando lucía el sol, la campana del taller era su señal para lanzarse a la aventura, rumbo a las guinguettes de Montmartre y de las orillas del Marne para bailar al son del acordeón. Su perturbador encanto acompañó a los estudiantes bohemios del Barrio Latino e inspiró a los artistas impresionistas, que, como Renoir y Manet, las convirtieron en las heroínas de sus cuadros.
 
Siempre enamoradas, combinaban a su antojo sensibilidad y coquetería y sabían cómo atraer las miradas tanto de jóvenes dandis aristócratas como de viejos carcamales. Las grisettes se liberaron en la Belle Époque del corsé moral de su siglo aportando toda su vitalidad a la formidable efervescencia de un tiempo nuevo.

“Los perfumes de Lubin nacen hoy del deseo de dar forma a los sueños, las ideas, las aventuras o la evocación de personajes que nos inspiran. El perfume sustituye así a la escritura, nos permite expresarnos sin pasar por el filtro de una cultura, un vocabulario o una sintaxis. Un perfume de éxito es un lenguaje universal. Y, ante todo, un placer”, Gilles Thevenin, director creativo de Lubin.
 
El acorde clásico de su composición se inicia con un manojo de rosas recién cortadas. Por primera vez desde hace décadas, se ha utilizado un alcoholato obtenido de la maceración del concreto de rosa. Este proceso preserva las notas más volátiles, que se funden con el pomelo y recrean la sensación verde de las rosas frescas. El perfume Grisette se cubre a continuación con notas empolvadas, amaderadas y especiadas para culminar con una estela de ámbar y vainilla.

La composición de Grisette:

• Las notas de salida cítricas, de pomelo y bergamota, combinadas con los alcoholatos de rosa, anuncian la sencillez natural de un manojo de rosas de Marruecos y de Bulgaria. 
• El corazón, discreto, esconde el concreto de lirio que se envuelve en una nube de incienso. 
• El fondo de madera de cedro, a la vez almizclado y ambarino, se suaviza con el absoluto de vainilla de Madagascar.

 Precio: 160€ / 100ml – 120€ / 50ml.