Entre las prendas estrella para esta primavera-verano existe una amplia variedad de exquisitas camisas en tejidos como el popelín, teñido en prenda en una paleta de colores pastel, la muselina de algodón a rayas tono sobre tono y la gasa con macro rayas.
También se introduce una nueva mezcla ligera de algodón y lino, para un uso cotidiano pero elegante, el exclusivo estampado degradé, que colorea la seda, y el satén especial algodón-viscosa para prendas exteriores de aspecto luminoso y precioso.
A destacar los colores elegidos para la colección concebida por Carlo Zanuso, que abarcan desde tonos como el amarillo mantequilla hasta el verde, el rojo carpa y el barro, mientras que las tonalidades más cálidas como el rosa magnolia y el naranja mandarina se combinan con tonos más neutros como el arena y el avellana.
El amarillo lima aporta un toque de luz, mientras que el azul índigo y el azul celeste se realzan con el antracita.